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Si quieres mantener tu empleo tienes que seguir estudiando [o ser funcionario]. Así funciona el capital humano

Querer descubrir el infinito nos hace diferentes
Querer descubrir el infinito nos hace diferentes (imagen cedida por Alexander van Dijk)

Las empresas apuestan por el capital humano. En los procesos de selección se valora cada vez más la actitud del candidato: número y calidad de los artículos que haya publicado, su asistencia a congresos, sus actividades de voluntariado, que tenga hobbies relacionados con las materias del puesto al que postula. Superar la fase de contratación es el principio de un proceso de aprendizaje en la empresa y la continuación de la formación del eterno postulante.

El conocimiento universitario se queda obsoleto antes de recibir el título. La educación exige formación continua. Una vez contratado, el empleado debe ganarse el puesto cada día por medio de formación específica y general. La específica, dotada por la empresa; la general, impulsada por medio de sistemas de gamificación. El profesional [y la empresa] debe valorar, trabajar y reforzar lo que se conoce como ‘capital humano’.

La Teoría del Capital Humano forma parte del cuerpo teórico de la Economía de la Educación, junto con las teorías de Segunda Generación, que se desarrollaron a partir de la primera. Surgió en la década de los 60 de la mano de SCHULTZ, BECKER y MINCER, quienes trataron de dar respuesta a la incógnita de la tasa de crecimiento de la renta, uniendo el factor de la educación al capital físico y al del trabajo.

El concepto de capital humano, fue dado a conocer por SCHULTZ en una conferencia que impartió en 1960. Puso en relación la habilidad y el conocimiento con el capital indicando que esta es una inversión deliberada cuyo crecimiento es mayor que el del capital convencional y convirtiéndola en rasgo del sistema económico. Ante estas afirmaciones, algunos autores presentaron su oposición a que se aplicase el concepto capital humano al hombre alegando razones de carácter económico o humanístico.

El capital humano presupone un comportamiento racional de los individuos, quienes calculan la conveniencia de invertir en su educación poniendo esta en relación con el coste y su potencial beneficio. La idea subyacente es que las habilidades y capacidades que se adquieren incrementan el factor productivo y, en consecuencia, la correspondiente retribución según el rendimiento marginal. A través de un prisma macroeconómico, vemos que a mayor educación, mayor crecimiento económico. Si el prisma usado es el de la microeconómica, vemos que el capital humano une la educación, la productividad y los salarios por medio de una relación causal directa. Esta segunda versión es, a su vez, dividida por CALERO en otras dos, fuerte o débil, en función de la repercusión en la inversión a futuro. En todos los casos, esta Teoría encuentra su aplicación práctica en la actualidad en acciones educativas mediante la generación de acciones formativas dentro de la empresa, así como por medio de las propias impulsadas por la Fundación Tripartita y las Administraciones Públicas.

Desarrollando la Teoría de del Capital Humano, surgen las teoría de Segunda Generación: la Teoría de la Selección, que señala la educación del trabajador como factor de selección usado por la empresas; la Teoría de la Competencia por los Puestos de Trabajo o de la Cola, que centra su atención en la selección de trabajadores para determinados puestos de trabajo y salario en función de su educación; y la teoría de los mercados de trabajo internos y segmentados, según la cual la educación determina el recorrido productivo y salarial de forma vitalicia. Las tres parten de la hipótesis de la selección negando la relación causal directa antedicha de la Teoría del Capital Humano.

La Teoría del Capital Social y las de Segunda Generación impulsan el desarrollo del individuo. Antes nos podíamos referir a un proceso colectivo de acumulación de conocimientos. Ahora se trata de un proceso centrado en la persona y diseñado para que la educación determine el recorrido productivo y salarial a lo largo de su vida.

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