Uno de los documentos paradigmáticos de la producción audiovisual es el libro o “biblia”. Utilizado en sitcoms y series televisivas en general, la biblia audiovisual es el documento que dota de continuidad a una obra por medio del despliegue literario de su línea argumental elemental más allá de la primera temporada proyectada. Su presentación toma habitualmente forma de dossier o carpeta informativa de entre 5 y 20 páginas de extensión que contienen apuntes, notas y datos sobre escenarios, acción y personajes. Como ejemplo puede citarse la biblia de la popular serie Friends, la cual en pocas páginas detalla los escenarios principales, la psicología de los personajes que la protagonizan y las relaciones que se forjan entre ellos.
La biblia audiovisual es un documento vivo, sometido a los designios del share, que cambia y se transforma según las exigencias del público y el presupuesto. Así, la biblia de la serie SmallVille (Alfred Gough y Miles Millar, 2001), basada en el personaje de ficción Superman, se ha tenido que ampliar al menos dos veces en los últimos 4 años ante el éxito inesperado de las temporadas 6 y 8, llegando hasta las 10 temporadas; la serie X Files (Chris Carter, 1993) tuvo que ser ampliada también en dos ocasiones introduciendo en la última (temporadas 8 y 9) cambios importantes en el cuadro de actores principales; en Lost (J.J. Abrams, Damon Lindelof, y Jeffrey Lieber, 2004), en cambio, la biblia no se amplió ni modificó, a pesar del éxito obtenido por la serie, en especial entre el colectivo geek[1].
Próximo post… La inspiración en la producción de adaptaciones
Si estás interesado en recibir alertas de la publicación de los siguientes post, contempla la posibilidad de suscribirte por rss o por correo electrónico. También puedes leer ya y descargar el artículo completo.
Imagen cedida por Billy Alexander (Charlotte, NC, United States)